viernes, 14 de noviembre de 2008

Astro de la noche




Como si las bellezas de este mundo
no bastaran para satisfacernos
colgaron un satélite del cielo,
juguetón como un chiquillo y cambiante.
Prodigio gratuito a nuestro alcance.
Faro de pertinaces noctámbulos.
Musa en poetas, delirio en amantes.
Genial decorado para misterios,
pecados, intrigas y algún secreto.

Cuando está llena alborota la mente
y hasta al cuerdo, dicen, vuelve demente.
Muchos confunden cuando crece o mengua
y todos la añoran cuando está nueva.

Luna lunera, de plata o de sangre
según quien escriba, mire o te cante.
Luna de metal o deseosa madre.

Astro que eres, de otro astro, reflejo
te miro de frente, al otro no puedo.
Miro de frente, te admiro y te quiero.

.



2 comentarios:

Mar del Norte dijo...

Mi admiración también hacia ti...
y hacia la luna lunera...
1beso

ABACO dijo...

Preciosa dedicatoria.
Una vez más demuestras una sensibilidad in extremis.

Realmente te admiro.